900 900 774
8/04/2022, El Mundo, Félix Cerezo
La subida exponencial del precio de los carburantes -el diésel se ha encarecido un 37% en lo que llevamos de año- y la petición de que sus servicios no se puedan contratar por debajo de los costes de explotación fueron las dos grandes razones que llevaron a la huelga de transportistas que se vivió en marzo.
Las medidas ya tomadas por el Gobierno -como el descuento de 20 céntimos en los combustibles- así como la promesa de garantizar una mínima rentabilidad a estos profesionales desactivaron las protestas. Aunque los camioneros tenían y seguirán teniendo otra espada de Damocles sobre sus cabezas: las multas a que se enfrentan y que pueden llegar a ser de hasta 18.000 euros.
PENA DOBLE: COMO CONDUCTOR Y PROPIETARIO
Además, el castigo es doble en el caso de los autónomos que conducen el vehículo y son también propietarios del mismo: a las sanciones por incumplir la ordenanza de transportes por carretera, hay que sumar las que les correspondan por violar la Ley de Tráfico. Por ejemplo, por usar el móvil sin manos libres, excederse en la velocidad o dar positivo en alcohol o drogas.
Para ubicarnos, solo el baremo de sanciones elaborado por el Ministerio de Fomento cuenta con casi 450 páginas explicando infinitas infracciones y su cuantía. Eso sí, para todo tipo de transportes (también el de personas, el sanitario o los vehículos de alquiler) y para todos los otros agentes (como los cargadores) que participan en el proceso.
DESDE 100 HASTA 6.001 EUROS
Los importes de las sanciones oscilan entre los 100 y los 400 euros en el caso de las leves; van desde 401 hasta 1.000 en las graves y las muy graves se clasifican en dos grupos. El primero implica multas de 1001 a 2.000 euros. En el segundo van desde los 2001 a los 4.000 euros. En estas últimas infracciones, el importe pasará a estar entre 6.001 y 18.000 euros si el responsable ya había sido sancionado por alguna de esos motivos en los 12 meses anteriores.
Dentro de los comportamientos más castigados se encuentran los aspectos relacionados con el tacógrafo (no llevarlo o haberlo manipulado); prestar el servicio sin tener el título habilitante; exceder los tiempos al volante; no cumplir con los de descanso y determinados excesos de carga. A esto hay que añadir que muchas infracciones llevan aparejada la llamada Perdida de Honorabilidad, lo que supone quedar inhabilitado temporalmente como transportista.
LIMITAR EL IMPACTO ECONÓMICO
Según la empresa de defensa de los automovilistas Dvuelta, superar el tiempo de conducción, junto con el exceso de carga son las sanciones más frecuentes, con un 53% de los casos. El siguiente epígrafe se refiere a la llamada Tarjeta de Transporte, con un 15%; la Hoja de Registro, supone otro 9%; el tacógrafo, un 6% y los casos de conductores extranjeros sin certificado añaden otro 5%. La situación puede ser dramática si se impone más de una sanción muy grave porque, aunque hay descuento por pronto pago, este es del 30% y no del 50% como ocurre en la normativa de Tráfico.
Por ello, desde Dvuelta piden medidas urgentes para flexibilizar ese impacto económico en unas cuentas ya muy maltrechas. Por ejemplo, convertir ese pago en créditos ICO o establecer moratorias y fraccionamientos por parte de las distintas Administraciones.
PRESENTES EN UN 13% DE LOS SINIESTROS
El control de éstas sobre los transportistas y la dureza del régimen sancionador está justificado por las características de los camiones y la responsabilidad añadida del transporte de personas o mercancías peligrosas.
En este sentido, Tráfico recuerda que camiones y autocares tienen un peso muy importante en la Seguridad Vial. Por un lado, son después de los turismos el segundo vehículo más numeroso, con un 14% del parque. Por otro, en 2020 estuvieron implicados en el 13% de los siniestros con víctimas. Accidentes que son más severos por su masa y dimensiones, que hace que el de vehículos lleven las de perder.
Por ejemplo, en los 2.705 accidentes sufridos por camiones en 2020, hubo 199 fallecidos. De ellos, 154 (el 77%) iban en turismo, moto, furgoneta o en otro camión. Tres de cada cuatro siniestros ocurrieron en carretera, lo que agravó sus consecuencias.
