16/10/2025
La Dirección General de Tráfico ha anunciado una medida clave para reforzar la seguridad en carretera: la llegada de más de 100 radares móviles que controlarán la velocidad en tramos en obras. Esta iniciativa, que entrará en vigor en 2026, busca reducir los accidentes y proteger tanto a los operarios de mantenimiento como a los propios conductores.
Radares móviles en tramos en obras: una innovación clave
Los nuevos radares, conocidos como “sobre ruedas”, son dispositivos móviles que podrán desplazarse con facilidad de un punto a otro según las necesidades de cada obra. Su función principal será supervisar el respeto a los límites temporales de velocidad, que suelen ser más bajos en estas zonas debido a la presencia de trabajadores y maquinaria.
Durante la 33ª Semana de la Carretera, el director de la DGT, Pere Navarro, recordó que cada año fallecen una media de cuatro operarios en obras viales. La velocidad excesiva sigue siendo el factor más recurrente en estos siniestros, por lo que califica la instalación de estos radares como una medida “urgente y necesaria”.
Señalización y cumplimiento
Para garantizar transparencia, cada radar irá precedido de un cartel informativo que avisará de su presencia y recordará la obligación de respetar la velocidad máxima señalada. De esta forma, la DGT no busca solo sancionar, sino también concienciar sobre los riesgos reales de conducir demasiado rápido en entornos de trabajo en carretera.
Impacto jurídico y recomendaciones para conductores
Desde el punto de vista legal, los dispositivos estarán homologados y contarán con plena validez jurídica a la hora de registrar infracciones. Esto implica que las sanciones por exceso de velocidad en estos tramos serán plenamente respaldadas por pruebas fiables.
Además, el control reforzado puede derivar en un aumento de denuncias y multas en caso de incumplimiento, por lo que se recomienda a los conductores prestar especial atención a la señalización temporal y adaptar su conducción a las condiciones específicas del tramo.