30/10/2025, Telemadrid
En Dvuelta hemos puesto la lupa en las restricciones de circulación que afectan a los vehículos sin etiqueta ambiental (categoría A) en el municipio de Madrid, y la conclusión a la que llegamos es alarmante: el costo global de esta medida para los ciudadanos afectados se moverá en una horquilla brutal, entre 6.000 y 9.000 millones de euros.
Esta cifra, que presentamos recientemente en nuestra aparición televisiva, no es una estimación al azar. Es el resultado de cuantificar el efecto directo que tendrá la nueva fase de la normativa de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE). Esta regulación se endurece progresivamente y, a partir de las fechas clave que ya conocéis, impedirá circular a los vehículos más antiguos, incluso a aquellos empadronados en la capital.
Nuestros datos indican que esta prohibición va a afectar directamente a más de 300.000 vehículos censados en la capital, lo que representa aproximadamente un 15% del total del parque móvil de la ciudad. El problema es sencillo, pero de una dureza económica enorme: al no poder circular, estos coches "van a tener que quedar paralizados". Esto fuerza a los conductores, de forma obligada, a la sustitución de su vehículo actual.
El Coste Individual: Una Carga de 30.000 € y la Desigualdad Social
Hemos desglosado este impacto y, con un cálculo que consideramos muy prudente, estimamos que el desembolso necesario para que un conductor afectado adquiera un coche compatible con la normativa actual y pueda seguir circulando se sitúa entre 20.000 y 30.000 euros. Multiplicando esta cuantía por los más de 300.000 vehículos que se verán afectados, obtenemos la magnitud del costo total: esos demoledores 6.000 a 9.000 millones de euros.
Pero la cifra más dolorosa de nuestro análisis es el profundo impacto social que esto genera. Queremos dejarlo claro: esta medida golpea con mayor dureza a las personas con menos recursos. Como bien dijimos en televisión, "por eso tienen un coche viejo". La prohibición está focalizada, de facto, en los barrios con menor renta de Madrid, zonas donde el vehículo particular es, en muchos casos, la única herramienta real para ir a trabajar o gestionar el día a día.
Calculamos que en distritos como Carabanchel, Usera, Villaverde o Vallecas se concentra hasta el 35% de estos vehículos sin etiqueta que están a punto de ser declarados inútiles dentro de la ciudad. Vehículos que son "perfectamente útiles para ser conducidos" y que, sin embargo, pasan a ser una fuente de gasto y un problema de movilidad. Esta concentración demuestra que la normativa, a pesar de su buen objetivo ambiental, está imponiendo una carga económica completamente desproporcionada en los segmentos de población más vulnerables.
Nuestro Compromiso: Denuncia y Defensa del Conductor
Desde Dvuelta, nuestra postura es firme. Denunciamos la ausencia de un plan de transición social y económica que sea justo y que acompañe estas restricciones. Las ayudas o alternativas que se han ofrecido hasta el momento no son suficientes ni están a la altura del enorme problema al que se enfrentan miles de familias madrileñas.
La situación es inaceptable: se está prohibiendo la circulación de bienes funcionales sin ofrecer una alternativa real y accesible a quienes más lo necesitan. Esto transforma la medida ambiental en un grave problema de equidad social y movilidad. La cifra de 9.000 millones de euros es un grito de alarma. Es el reflejo de la urgencia de replantear los mecanismos de apoyo para evitar que los ciudadanos con menor poder adquisitivo sufran una parálisis económica.
En Dvuelta no nos quedamos en la denuncia. Nuestro compromiso es y seguirá siendo ofrecer nuestro asesoramiento, defensa y representación legal a todos aquellos conductores que vean comprometida su movilidad por esta o cualquier otra restricción de tráfico. Estamos aquí para defender vuestros derechos y los intereses de los conductores.